El frio en la obra

Un lunes cualquiera madrugamos para ir a trabajar a la obra (en mi caso).
Ya en el termometro de la farmacia de abajo veo -8º lo cual hace adivinar el día que nos espera.
Estos días estamos en un interior, lo cual nos resguarda algo, pero el frio llega a todos lados.

Como es lógico, vaciamos la manguera del agua para evitar que se congele el agua cada tarde al marcharnos, habiamos dejado un capazo con agua (de limpiar la hormigonera) el viernes pasado, esto es lo que nos hemos encontrado:



José no se cuanto pesará, pero bastante y no es ningún truco, vean los pies:



El agua se congeló de tal modo que la capa de hielo superior resistia el peso de una persona.
Nos pusimos a trabajar (El frio se percibe menos) y al hacer una hormigonera de mortero para tapar agujeros y grietas (Pese a verter anticongelante en el amasado) a los pocos minutos nos encontramos esto colgando de la hormigonera:



Con este panorama tuvimos que optar por ir abriendo las rozas de la pared, ya que esto no precisa materiales y no entiende de frio.



La entrada de hoy se la dedico a todas esa personas que, como yo, trabajan en las reformas y la construción.