En el número 59 de la Avenida de Mariano Andrés encontramos este bonito edificio.
Durante las obras y venta de los pisos colgaba una enorme pancarta que los anunciaba como pisos de lujo.
No he conseguido encontrar una fotografía de mejor calidad, aunque apuesto a que
todo el que vio el cartel lo recuerda.
Es el edificio que está frente a la plaza Juan de Austria (donde la iglesia de las Ventas).
El caso es que pese a anunciarse como pisos de lujo (entiéndase, de calidad) parte del alero se está desprendiendo y cayendo a la acera.
Lo he querido traer hoy a la sección de fotodenuncias por el peligro que conlleva para con los peatones.
La parte más alta de la moldura de hormigón se está desprendiendo de la moldura.
Es fácil adivinar que el resto no tardará mucho en caer y los cascotes tienen un tamaño considerable, suficiente para herir en la cabeza a un peatón.
Este cascote es el que se desprendió de la esquina.
He fotografiado los cascotes junto a mi teléfono móvil para que se puedan hacer idea del tamaño de los mismos.
Posteriormente les he dejado arrimados al edificio, donde los encontré.
El edificio tiene alrededor de 16 metros de altura, cualquier cascote que se desprende se convierte en un auténtico proyectil.
Es curioso comparar las obras que se realizan hoy en día con las de antes, por tierra de campos aún podemos encontrar casas con más de 100 años y ver estos edificios como el que hoy expongo me hace reflexionar.
La nueva normativa de la ITC (Inspección Técnica de la Construcción) - mal llamada ITV de los edificios - afecta a viviendas de 35 ó 40 años, después de ver esto me pregunto si no deberían de revisarse todos sin baremo alguno.
En este mismo plano la mala ejecución de obras no deja de sorprenderme constantemente, plaquetas en Papalaguinda que se caen el día que las ponen, parkings en los que no hay espacio para abrir las puertas y bajarte del coche, adoquines que se levantan alrededor de la catedral una y otra vez, sumideros que se rompen todas las semanas...
Si, los parkings son privados y las obras las realizan empresas privadas, pero poco importa eso a quien le afecta, las personas de a pie no queremos encontrarnos baches, ni que nos caigan trozos de cornisa mientras paseamos por la acera, de poco nos sirve conocer al responsable.
Para finalizar el post expongo la fotografía del cartel de los locales comerciales del edificio al lado de una gran desconchón.
¿Éxito asegurado? déjeme que lo ponga en duda.
Acá en Argentina pasa lo mismo. Un arquitecto tuvo la caradurez de decirme que las casas se hacen para 10 años! y claro, te cuestan el esfuerzo de una vida..
ResponderEliminarAl final encontraste algo bueno paa publicar, menudo lujo de edificio... intentaré no pasar nunca por debajo.
ResponderEliminarAl final tendremos que salir con el casco puesto por si las mosquis.
ResponderEliminarPero nunca pasa nada "hasta que pasa" los pisos nuevos porque son nuevos y los viejines porque no pasan ninguno la ITV mal llamada.
¡¡Ay!! si los romanos levantaran la cabeza y viesen que sus construcciones ahí siguen y nosotros no somos capaces de mantenerlas dignamente ni una primavera.
Besines y buen verano para todos.
Irma.-
Después de ver esto se le quitan a uno las ganas de comprar piso. Buen trabajo!
ResponderEliminarPues nada, hasta que pase una desgracia...
ResponderEliminarRecuerdo que ese edificio se construyó tras el derrumbe, hace unos años, del antiguo edificio que se encontraba en muy mal estado. En esa ocasión falleció una persona atrapada entre los escombros.